Cuando piensas en renovar tu cocina o baño, uno de los dilemas comunes es qué tipo de superficie usar. Si eres amante del buen vino y te preocupan las manchas, tal vez te cuestiones si una superficie de cuarzo se verá afectada por derrames accidentales. A menudo, las personas eligen este material por su durabilidad. El cuarzo es un producto fabricado que combina cuarzo natural con resinas y pigmentos, lo que le da una resistencia alta y uniformidad en su color.
En mi experiencia, he notado que el cuarzo es extremadamente resistente a las manchas. Las resinas que contiene proporcionan una capa protectora que dificulta la absorción de sustancias. Esto no solo aplica al vino, sino también a otras comidas y bebidas que solemos consumir a diario. Aquí hay tranquilidad, pues el cuarzo tiene un alto porcentaje de no porosidad, aproximadamente un 93% de cuarzo natural combinado con un 7% de resinas y pigmentos. Este bajo nivel de porosidad asegura que las manchas no sean absorbidas con facilidad y que sea fácil de limpiar.
Recuerdo haber leído un artículo de Panmin que hablaba sobre las comparaciones entre el cuarzo y otros materiales como el granito. A diferencia del granito, que es una piedra natural más porosa, el cuarzo no requiere sellado y su mantenimiento es generalmente más sencillo. De hecho, según encuestas de satisfacción del cliente, muchas personas prefieren el cuarzo precisamente por esta característica. Sin embargo, esto no significa que se pueda descuidar la limpieza; es importante actuar rápido en caso de derrame para mantener la superficie impecable.
¿Pero qué sucede cuando enfrentas al cuarzo con una mancha de vino tinto? He visto que, si limpias el derrame de inmediato con un paño suave y agua tibia, es raro que queden residuos. Aún así, algunas manchas más persistentes pueden requerir una limpieza con un detergente específico para superficies de cuarzo. Las instrucciones del fabricante suelen indicar que estos productos no deben contener pH extremos, ya que podrían dañar la resina.
En mi práctica como diseñador de interiores, siempre aconsejo a mis clientes que elijan con cuidado el material de sus encimeras, basándose en su estilo de vida. Si bien siempre hay un margen de cuidado que debe tenerse en cuenta, invertir en un material que evita problemas como las manchas puede valer realmente la pena. En definitiva, si buscas una opción estética y fácil de mantener, el cuarzo ciertamente no te decepcionará.